La HALITOSIS o mal olor de boca se ha atribuido casi siempre a trastornos gástricos, sin embargo, estudios recientes afirman que el mal olor es originado en un 87% de los casos en la cavidad bucal.
El olor es similar al gas metano, y es producto de compuestos volátiles derivados de la degradación de las proteínas por las bacterias Gram- que se encuentran en la boca. Por lo tanto, es importante mantener la boca libre de las bacterias causantes del trastorno. Para ello, deben eliminarse todos los focos infecciosos, como caries, enfermedad periodontal u otros. Y además adoptar medidas higiénicas que eviten su recurrencia.
Debemos tener en cuenta que, aunque la placa bacteriana, el tabaco y alcohol no son los causantes, si favorecen la halitosis.
Por lo que el tratamiento, una vez tratadas todas las patologías orales será:
- Visitar periódicamente a su dentista para eliminar cualquier foco infeccioso y realizar una limpieza profesional.
- Control dieta (controlar la ingesta de proteínas, como carne, huevos,..)
- Evitar periodos largos de ayuno.
- Reducir o anular tabaco y alcohol.
- Medidas higiénicas:
- Cepillado 3 veces/día, también cepillar carrillos y lengua (limpiador lingual HALITA).
- Limpieza interdental, con hilo o seda dental o bien con cepillos interproximales.
- 15 o 20 gotas Clysident Plus (Peróxido de carbamida) en la lengua, no enjuagarse y escupir exceso o KIN spray Halitosis en lengua.
- Controlar:
- Boca seca: BIOTENE: colutorio (Oral Balance), gel humectante o chicles.